Tesla ha informado a las autoridades estadounidenses que realizará una llamada a revisión de 362.758 vehículos que presentan problemas con su software de ayuda a la conducción, conocido como Full Self-Driving Beta (FSD Beta).
Los modelos afectados por esta revisión son el Model S, Model X, Model 3 y Model Y, desde los años 2016 hasta el presente, equipados con FSD Beta. La revisión se debe a que el software FSD Beta puede hacer que el vehículo actúe de forma insegura en intersecciones y puede ignorar señales de stop, semáforos en amarillo y límites de velocidad.
Cabe destacar que el FSD Beta es un software de prueba que incorpora ayudas a la conducción no disponibles en el sistema de suscripción FSD que Tesla ofrece en sus vehículos y que para poder usarlo, el usuario debe tener el FSD, que tiene un coste de 15.000 dólares. Tesla actualizará de forma remota el software para solucionar los problemas detectados en el FSD Beta. La llamada a revisión es una de las más grandes en la historia de la compañía.
Tesla permite utilizar el FSD Beta a miles de conductores mientras perfecciona el sistema.
El fabricante de automóviles dijo a NHTSA que actualizará de forma remota el software para solucionar los problemas detectados en el FSD Beta.